Es un libro corto, pero maravilloso, sobre todo si se tienen niños en casa。 Nos enseña el valor del esfuerzo, de la diversidad cultural y de como se pueden sortear los peores obstáculos con la esperanza de ser alguien mejor en la vida。 Las ilustraciones demuestran el espíritu del libro, la muestra de que en este mundo no hay fronteras, pero si mucho color。